El Superior Tribunal de Justicia recalificó como femicidio el crimen de la obereña Antonella Bernhardt. El femicida cumplirá prisión perpetua. El papá de Antonella cuestionó los plazos judiciales, pero se mostró satisfecho con la resolución del STJ: “Ahora estamos más cerca de la justicia”
“Es lo que esperábamos. No es algo que nos traiga alegría, pero sí un cierto nivel de alivio”, reflexionó Carlos Bernhardt respecto a la recalificación como femicidio del crimen de su hija Antonella Bernhardt (27), ultimada el 4 de abril de 2019 en Posadas.
Asimismo, visiblemente emocionado lamentó que “todo esto llevó tanto tiempo que le consumió la vida a mi mujer, y ella no está presente para enterarse de esto en vida. Eso es un dolor muy profundo”.
Precisamente, en noviembre de 2023 el Tribunal Penal Uno de Posadas condenó a 20 años de cárcel por homicidio simple al fotógrafo Cristian Daniel Vargas (35).
La madre de Antonella asistió al debate y escuchó la sentencia que fue cuestionada por la familia y allegados. Tiempo después falleció.
En ese interín, el fiscal Martín Alejandro Rau y el abogado querellante Mauricio Fausto Vergara apelaron el fallo y esta semana el Superior Tribunal de Justicia (STJ) anuló lo dispuesto por el TP Uno de Posadas, recalificó el caso como femicidio e impuso la pena de prisión perpetua para Vargas, quien deberá cumplir 35 años de cárcel efectiva.
En diálogo con este medio, el padre de Antonella contó sus sensaciones, llamó a educar contra la violencia de género y cuestionó los plazos de la justicia.
“Que el Superior Tribunal haya confirmado que se trató de un femicidio, tiene un significado muy especial para nosotros como familia, porque da un contexto distinto a la interpretación de lo que realmente sucedió”, subrayó.
Destacó que, con la pena impuesta, Vargas “no tendrá la posibilidad de lastimar a otra persona, y eso para mí, tiene un valor muy especial”.
Vacío y dolor
Más allá de las pruebas y testimonios de la instrucción y del juicio que dieron cuenta de la brutalidad del femicida, para el TP Uno de Posadas no fue suficiente para imponerle la máxima pena.
Al respecto, Carlos Bernhard fue categórico: “Nunca entendí el por qué no se valoró de manera adecuada el cúmulo de pruebas que había. Yo no necesité el resultado de la autopsia para darme cuenta de la violencia terrible que sufrió Antonella”.
“Tenía del lado izquierdo un golpazo que no pudo haberse hecho con una mano, tampoco al caer. Fue agredida con algún objeto contundente que la desarmó. Y todo lo otro fue posterior. Me refiero al cuchillazo ese… y me cuesta hablar al respecto. Pero todo eso era notorio, se veía a simple vista y fue corroborado por la autopsia. Eso es lo que no termino de entender. No fueron un par de ‘tapes’ como dijo; fue mucho más que eso, y se veía a simple vista. Los análisis posteriores simplemente corroboraron lo que se veía”, agregó.
Por ello, destacó el análisis efectuado por el máximo órgano judicial de Misiones.
“Creo que el STJ analizó las pruebas de manera más objetiva, más profesional tal vez, y el resultado está a la vista. Por eso creo que ahora estamos más cerca de la justicia”, enfatizó.
Como contrapartida, reconoció que el hecho que su esposa no haya podido conocer el nuevo fallo le produce “una sensación de vacío muy grande y mucho dolor”.
Educar contra la violencia
Más allá de su cargo de defensor del pueblo de Oberá, rol que ostentará hasta marzo de 2026, Carlos Bernhardt posee una extensa trayectoria en el ámbito educativo como bedel y preceptor. Eso, más la experiencia límite que le tocó atravesar, le dan autoridad para plantear un posible abordaje a la violencia de género que no para.
“Primero me gustaría que fuera un tema que se aborde con más asiduidad desde temprana edad, por ejemplo, en las escuelas secundarias, y que se continúe en las carreras que tengan que ver con la docencia, con una óptica profesional que tienda a la prevención. Es muy importante”, indicó.
En ese contexto, detalló como bedel en un nivel superior y preceptor en la secundaria, en más de una oportunidad tuvo que aconsejar, especialmente a chicas jóvenes que tenían su primera relación.
“En esas situaciones notaba que en Misiones tenemos todavía una mentalidad machista muy arraigada, que cuesta mucho reconvertir a los tiempos que vivimos. Se notan cambios, gracias a Dios, pero todavía no son suficientes”, opinó.
“Inercia de no hacer”
Por otra parte, el padre de la víctima de Vargas cuestionó los tiempos y metodología de la justicia, aspectos que la alejan de la sociedad.
“No pueden ser seis años y pico para resolver algo que estaba cantado. Hay como una inercia de no hacer. No era una investigación compleja. Por eso no me explico la tremenda demora que hubo, y si hubo alguna demora justificada, por qué nunca hubo una explicación real al respecto. Los tiempos de la justicia deben ser revisados de manera rápida, de manera efectiva y que den resultados”, remarcó.
Y graficó su pensamiento: “Un amigo siempre me dice: esto está escrito por abogados, en lenguaje de abogados y para abogados. Muchas veces te dan las explicaciones en un papel, pero si no sos abogado, no lo entendés. También eso hay que revertirlo y que la gente lo pueda entender. A la fuerza empecé a entender un poco; pero no puede ser que todo sea en un lenguaje estrictamente legal. Habría que tener un léxico entendible para el común de la gente”.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
