Orden judicial mediante, esta mañana decomisaron mercadería de puestos informales sobre ruta 14. Luego se hizo viral un empleado municipal exhibiendo dos mangos y diciendo que no sabe si venderlos por kilo por docena, lo que generó indignación en las redes. Trascendió que será sancionado
Esta mañana fue noticia un operativo ordenado por el Juzgado de Faltas de Oberá para el decomiso de mercadería de puestos informales ubicados sobre la ruta nacional 14.
El secuestro de frutas y verduras se dio luego de tres intimaciones a los vendedores, según indicaron desde el Gobierno de la Ciudad. Además, previamente se instó a regularizar la situación comercial y sanitaria, lo que no prosperó y fue necesaria la intervención judicial y policial.
Se trata de una cuestión compleja y que enfrenta la necesidad de trabajar que tienen las personas para ganarse el sustento diario con la obligación del estado de regular el uso del espacio público, sobre todo por el riesgo que implica este tipo de actividades sobre una arteria de alto tránsito.
También es cierto que en algunos puestos comenzaron vendiendo sandías y fueron ampliando la oferta a bolsas de papa, cebolla y gaseosas, entre otros, lo que implica una logística y da la pauta de que los responsables bien podrían regularizar la actividad.
Asimismo, desde Vialidad Nacional -con responsabilidad sobre la ruta 14- vienen exigiendo medidas para evitar este tipo de actividades informales.
En concreto, hoy se procedió al decomiso de la mercadería de los puestos. Eso en el marco de la ley, aunque tuvo más trascendencia la actitud de un empleado municipal (o dos, incluido quien grabó) que se hizo viral burlándose de todos: de puesteros y autoridades.
En las imágenes se ve al muchacho exhibiendo dos mangos y diciendo que no sabe si venderlos por kilo por docena. Así, no hizo más que echar nafta al fuego de un asunto sensible y complejo, lo que generó innumerables muestras de repudio en redes sociales, y con razón.
Al respecto, desde el área de Asuntos Jurídicos de la Municipalidad adelantaron que el empleado será sancionado, según los alcances del estatuto.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
