La estafa consistía en que los delincuentes solicitaban un motomandado para enviar un paquete, pero antes el trabajador debía abonar un monto que luego le sería devuelto en el destino, lo que luego no ocurría porque iban a una dirección inexistente.
El 18 de mayo el propietario de una empresa denunció que requirieron un servicio en calle Alberdi al 600, solicitando el pago de 35.000 pesos por unos repuestos que debían ser entregados en calle Tobogán, lo que resultó ser una dirección falsa.
La maniobra se habría repetido varias veces en perjuicio de diferentes empresas.
Iniciada la pesquisa, personal de la División Investigaciones procedió a la detención de dos sospechosos identificados como Catriel Alexander M. (30) y Jonathan Maximiliano Q. (33), además del secuestro de dos celulares.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
