A las 12.45 de este viernes, protegida por sus custodios, Karina Milei salió agachada y al trote del local de Eu Sport, frente a la plazoleta Güemes de Oberá, donde minutos antes se refugió escapando de los reclamos por los recortes impulsados por su hermano, el presidente Javier Milei.
La traumática visita a Oberá fue tan fugaz, que ni siquiera pudieron exhibir la motosierra que tenían para decorar el acto en el Centro Cívico, ocasión pensada para la foto con Diego “Gato” Hartfield, quien encabeza la lista de diputados provinciales de La Libertad Avanza (LLA) con vistas a la elección del próximo 8 de junio.
De por sí la convocatoria de militantes libertarios fue escasa; a lo que se sumó que productores, tareferos, docentes, desempleados y jubilados coparon el Centro Cívico para expresar su rechazo a las políticas de recorte y exclusión que impulsa Milei.
Precisamente, los integrantes de la cadena yerbatera fueron muy afectados con la desregulación del sector, por lo que esta mañana llegaron con pasacalles y proclamas.
En ese contexto, según informaron desde la Unidad Regional II de Policía, fue una funcionaria y militante libertaria quien encendió la mecha de la discordia.
“La tensión comenzó porque una funcionaria de Anses tiró un cartel de los tareferos. Ante eso, una referente de los tareferos la enfrentó y comenzaron a discutir. Si bien se calmaron, la situación generó una tensión que estalló después”, indicaron.
Al respecto, ante la posibilidad latente de que Karina Milei sea repudiada en el Centro Cívico, su custodia decidió que estacionen su vehículo a media cuadra, frente a la Güemes, donde dispuso de un par de minutos para hacer unas pocas selfis con fanáticos, tras lo cual se metió al local de Eu para evitar a los manifestantes y sus pedidos.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
