Olivia Márquez y Sandro Leiva fueron asesinados el 28 marzo de 2017 en una chacra de Puerto Rosario. En 2021, el ex cabo de la Policía de Misiones Víctor Dlugokinski y su cuñado Leandro Bublitz fueron condenados a perpetua. Hoy comenzó a ser juzgado Pablo Dlugokinski, quien luego del hecho escapó a Brasil
Pablo Dlugokinski (42) comenzó a ser juzgado este martes por el doble homicidio de Olivia Márquez (46) y su concubino Sandro Leiva (41), registrado el 28 marzo de 2017 en una chacra de Puerto Rosario, municipio de Florentino Ameghino.
El imputado afronta la pena de prisión perpetua, la misma que el 6 de mayo de 2021 les fue impuesta a su hermano, el ex cabo de la Policía de Misiones Víctor Dlugokinski (39), y a su cuñado Leandro Bublitz (42).
Precisamente, durante la instrucción y el juicio, los últimos apuntaron las responsabilidades del hecho hacia Pablo Dlugokinski, quien entonces se hallaba preso en Brasil.
Ocurre que luego del doble homicidio el mismo escapó hacia el vecino país y durante un par de años vivió sin complicaciones, hasta que una mujer lo denunció y terminó tras las rejas.
Cumplidos los trámites de rigor, fue expulsado de Brasil el 10 de noviembre de 202l, es decir seis meses después del juicio contra su hermano y su cuñado.
Hoy, trascurridos más de ocho años del doble crimen, el citado se sentó en el banquillo de los acusados y se abstuvo de declarar.
La primera testigo de la jornada fue Daiana Mouls, hija de Márquez, quien se quebró ante el Tribunal al recordar las horas posteriores a la desaparición de la pareja y el momento del macabro hallazgo.
“Tuve que reconocer a mis padres en una bolsa”, declaró entre lágrimas, ratificando que todos los implicados son sus primos y se criaron juntos.
Vale recordar que los acusados, los dos condenados y el tercero en ser juzgado, quedaron complicados luego que una patrulla de Gendarmería los identificó trasladando la moto de las víctimas en el baúl del coche del policía.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
