Fue detenido un obereño sospechoso de un brutal homicidio en Santo Tomé, Corrientes

Enzo Iván Rodríguez fue capturado en Oberá por agentes de Investigaciones de la UR II. Las pruebas que lo incriminan junto a su presunto cómplice. Tenía pedido de captura internacional. El lunes será trasladado de Corrientes

La paciente tarea de los investigadores de la Unidad Regional II de Policía posibilitó la detención de un obereño acusado del homicidio del profesor y bibliotecario Julio Jesús Espíndola (43), perpetrado el pasado 8 de abril en la localidad de Santo Tomé, Corrientes.

El sospechoso, identificado como Enzo Iván Rodríguez (25), fue capturado esta tarde cuando transitaba a pie por calle Formosa de Oberá.

A fines de mayo, el juez de Garantías de Santo Tomé, Edgardo Félix Blanco, había solicitado la captura internacional del obereño.

En consecuencia, personal de la División Investigaciones de la UR II inició pesquisas de rigor y en poco más de dos semanas lograron ubicar a Rodríguez.

El juez de instrucción local en turno Horacio Alarcón dispuso las medidas del caso y el lunes el detenido sería trasladado a Corrientes y puesto a disposición del magistrado que entiende en el homicidio de Espíndola.

Con relación al hecho que se investiga, la víctima fue encontrada sin vida por allegados en su domicilio del barrio 20 Viviendas de Santo Tomé el pasado 11 de abril.

Espíndola fue asesinado en su casa

Desde un primer momento se confirmó que padeció una muerte violenta ya que el cadáver presentaba múltiples excoriaciones y tenía un trapo en la boca.

Las primeras tareas de investigación derivaron en la detención de un allegado a la víctima y conocido del obereño.

María Espíndola comentó que el primer detenido -Javier Melgar (60)- le habría presentado a Rodríguez a su hermano Julio, quien le alquiló una habitación en su casa. El argumento fue que el obereño trabajaría en la parrilla de Melgar.

Móvil y pruebas

Pero en realidad, desde un primer momento la intensión de los presuntos cómplices habría sido aprovecharse de Espíndola, quien tenía un buen pasar y residía solo.

“Mi hermano me contó que Melgar le dijo que tenía un parrillero de Misiones y le preguntó si le podía alquilar una pieza. Como Julio vivía solo le dijo que sí. Los primeros días todo transcurrió con normalidad, pero después hubo discusiones porque el muchacho este (por Rodríguez) no iba a trabajar y tampoco le pagaba el alquiler”, indicó la hermana de la víctima.

Por los indicios que la investigación en Corrientes, el homicidio se perpetró el 8 de abril.

El registro de cámaras de seguridad de la zona confirman que ese día Rodríguez abandonó la casa con la moto de Espíndola, mientras que Melgar se retiró con su vehículo en cuyo interior se sospecha que llevaba el televisor y otros elementos de valor de la víctima.  

Precisamente, el móvil del homicidio habría sido el robo, ya que también faltó dinero. Tampoco se descarta que Espíndola los haya encontrado infraganti y por ello lo ultimaron.

Una filmación corrobora que Rodríguez llegó a la terminal de ómnibus local con la moto de la víctima. Luego abordó un colectivo hacia Misiones.

El primer indicio del crimen se dio el lunes 10 de abril, ya que el profesor y bibliotecario no se presentó a trabajar, siendo que nunca faltaba a sus compromisos laborales. 

El martes 11 a la mañana, como tampoco respondía el celular, allegados se acercaron a su casa y sintieron un olor nauseabundo. Tras golpear varias veces sin respuesta, decidieron abrir la puerta y se encontraron con el terrible cuadro.

El cadáver de Espíndola se hallaba en el baño con evidentes signos de haber sido asesinado.

Sugestivo posteo en Facebook

Las primeras pistas apuntaron a Melgar, conocido en Santo Tomé, tras lo cual fue implicado el obereño.

Tras el pedido de captura internacional, personal de Investigaciones de la UR II inició las pesquisas por distintos puntos de la zona Centro y la provincia.

Así, dieron con un primer dato que señaló que Rodríguez se refugiaba en el barrio Escondido de la localidad de Los Helechos, donde luego se determinó que efectivamente había estado, aunque no regresó por el lugar.

La continuidad de las tareas de inteligencia, entrevistas con familiares y conocidos, además de la implementación de puestos fijos en zonas estratégicas, finalmente hoy los investigadores lograron identificar al sospechoso.

Fue así que alrededor de las 16.10 se logró su detención sobre calle Formosa, luego de dos meses del violento homicidio de Espíndola.

“Es una buena noticia para la familia, y esperamos que los culpables paguen lo que hicieron. Mi hermano era una buena persona, trabajador y honesto. Es horrible lo que le hicieron, un dolor muy grande para la familia”, reflexionó su hermana.

Sugestivamente, el mismo 11 de abril, día del hallazgo del cadáver de Espíndola, en su perfil de Facebook Rodríguez publicó “Se re pudrió, se re pudriooo, nos paramos rrreee de manos (sic)”.

Publicación del 11 de abril

El mismo día posteó una foto con cervezas y la frase: “Como me reciben en San Pedro”, tal vez con la intención de confundir sobre su paradero. 

Lo cierto es que Rodríguez fue detenido y puesto a disposición de la justicia tras la buena tarea de la renovada División Investigaciones de la UR II.

.

.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *