El pequeño evoluciona favorablemente en el Samic de Oberá. Se halla medicado y comenzó a comer. La mamá tiene 17 años y se encuentra internada en el Madariaga. La familia materna tendría intenciones de hacerse cargo del pequeño
Los profesionales que asisten al bebé recién nacido que el sábado fue rescatado de una letrina en la localidad de San Vicente no salen de su asombro ante la buena evolución que presenta el pequeño, al tiempo que calificaron como un “milagro” que haya sobrevivido y se encuentre sano.
En cambio, hasta el momento no está claro si la familia de la progenitora -una menor de 17 años- estaba al tanto o no del embarazo.
El director del Hospital Samic de Oberá, Héctor González, precisó que la criatura se halla bajo un esquema triple de antibióticos y le suministraron la antitetánica. Precisó que las primeras 24 horas estuvo en ayuna, pero el domingo empezó a alimentarse.
“El bebé estuvo doce horas en la letrina, que esté vivo es un milagro”, subrayó.
En tanto, desde la familia materna se turnan para acompañar al recién nacido y tendrían intención en hacerse cargo de él.
Según se reconstruyó hasta el momento, el último viernes una menor de 17 años fue hallada desvanecida en su habitación, en medio de un charco de sangre.
En ese contexto, la joven fue trasladada al Hospital de San Vicente y, en primera instancia, se la consideró como una paciente que padeció un aborto. Por la hemorragia que presentaba fue derivada al Hospital Madariaga de Posadas, donde permanece.
“Si bien la familia sospechaba que estaba embarazada, porque tenía pancita, la menor lo negaba”, indicó un vocero del caso, versión que contradice lo que habría dicho el padre en sede policial.
Ya el sábado por la mañana, el progenitor se dirigió a la letrina de la casa y escuchó un tenue llanto, tras lo cual observó y rescató al recién nacido.
Intervención policial
El lapso de tiempo transcurrido entre que la menor fue hallaba desvanecida y posterior el rescate del bebé rondó las doce horas, tiempo estimado en que permaneció en la letrina.
Apenas sacó al pequeño del sanitario, Rubén K. (63) lo trasladó al Hospital de San Vicente.
Allí el recién nacido fue higienizado, ya que hasta tenía gusanos en el cuerpo, tras lo cual lo trasladaron al Hospital Samic Oberá.
“Está sin distrés, sin dificultad respiratoria; tenía un poco hinchadas las manos y los pies, y las conjuntivas también inflamadas. Es un bebé a término y en peso adecuado”, precisaron desde el Samic.
Asimismo, remarcaron que “estuvo doce horas en el pozo; doce horas sin ingesta, pero no estaba hipoglucémico. Aparentemente, la mamá cortó el cordón. No sabemos cómo no se desangró”.
La Policía tomó intervención en el caso el sábado al mediodía, cuando desde el Hospital de San Vicente notificaron que un hombre arribó con un bebé recién nacido al cual habría rescatado del interior de un baño tipo letrina.
En el lugar, la médica de guardia mencionó que momentos previos entrevistó a Rubén K., quien manifestó que su hija de 17 años se encontraba cursando un embarazo, pero el viernes se descompensó y fue trasladada al mismo centro asistencia. Luego fue derivada al Hospital Madariaga.
La menor fue acompañada hasta Posadas por su progenitora. Según el padre, en un primer momento le diagnosticaron un supuesto aborto de 16 semanas, aunque ignoraba si realmente se encontraba en ese tiempo de gestación.
Luego del traslado de su hija al Madariaga, el progenitor regresó al domicilio y recién al otro día encontró al bebé en el interior de la letrina.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.