Durante 10 días los familiares de Inés Z. (67) la buscaron desesperadamente y llegaron a pensar lo peor, ya que la jubilada desapareció sin dejar rastros. Preguntaron a vecinos y conocidos, pero nadie sabía nada, por lo que radicaron una denuncia policial.
Finalmente, Inés regresó ayer a su domicilio en el barrio Tres Esquinas de Oberá sana y salva.
De todas formas, notificados al respecto personal de la Seccional Segunda entrevistó a la mujer y posteriormente fue examinada por el médico policial en turno, quien diagnosticó que «goza de buen estado de salud y no presenta lesiones físicas».
Por orden del juzgado interviniente se recepcionó declaración testimonial a la señora y la misma manifestó que el pasado 14 de julio se retiró de su domicilio y fue a la casa de un amigo, de apellido García, que reside en la localidad de Garupá, donde permaneció hasta la fecha en que regresó a Oberá.
En esos días cobró sus haberes, por lo que dispuso de dinero para sus gastos.
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Daniel Villamea, periodista, hincha de River (no fanático), Maradoniano, adicto a Charly García, Borgiano y papá de Manuel y Santiago, mis socios en este proyecto independiente surgido de la pasión por contar historias y, si se puede, ayudar a otros.
