“Fue una semana muy bendecida”: solidaridad a favor de un paciente oncológico

“Mucha gente me llamó, nos pagaron la boleta de luz, colaboraron con mercadería. La verdad que no hay palabras para agradecer la bondad de la gente”, destacó Graciela Cardozo, esposa de Juan García, de la localidad de Panambí

El último lunes se publicó el pedido de Graciela Cardozo, esposa de un paciente oncológico de la localidad de Panambí que requería de la solidaridad para sortear la difícil situación económica que padecía la familia.

Por fortuna, muchas personas bien intencionadas -particulares y en representación de instituciones- se contactaron con Cardozo y ofrecieron su granito de arena para colaborar.

“Fue una semana muy bendecida. Mucha gente me llamó, nos pagaron la boleta de luz, colaboraron con mercadería y cuando vayamos a Posadas por la quimio nos esperan para ayudarnos. La verdad que no hay palabras para agradecer la bondad de la gente, y no quiero nombrar a nadie porque seguro me olvido de alguien. Pero a todos muchas gracias y que Dios los bendiga”, subrayó emocionada.  

Tal como se publicó, hace siete meses que la vida de Juan García (54) y de su familia sufrió un cambio dramático. El hombre se enfermó y primero pensaron que era neumonía, pero una posterior tomografía confirmó que se trata de cáncer de pulmón.

Pedido y ayuda

García, su esposa Graciela Cardozo y sus hijos de 18, 12 y 9 años residen en el Kilómetro 7, en la localidad de Panambí.

“Hace cuatro meses que empezó con el tratamiento de quimioterapia en el Hospital Madariaga de Posadas. Tiene días mejores y peores, ahora está bastante decaído y con dolores. Él siempre trabajó para mantener a la familia, primero en aserradero y después como albañil, pero ahora no puede trabajar por su estado de salud”, explicó su mujer.

En ese contexto, a principios de la semana reconoció que en los últimos meses “se fueron los ahorros que teníamos y ahora nos aprietan las cuentas, hay que pagar la luz y la comida”.

En tanto, tras la publicación muchos misioneros se conmovieron con el caso y tendieron una mano solidaria. Incluso, según su esposa, la buena onda “le hizo bien a Juan, que estaba muy preocupado y ahora se tranquilizó para seguir con el tratamiento”.  

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